Anoche vi esta película que venía persiguiendo hace un tiempo, ya que todas las bandas que figuran en ella me gustan de sobremanera.
Nirvana, Sonic Youth (aparte tocando una versión increíble de teenage riot), Dinosaur Jr, Ramones, Babes in toyland, groso.
Esta cinta, rodada completamente en la gira del 91 (cerca del estallido del grunge) por Europa refleja perfecto la transición del plástico a la basura. Música y uno que otro intermedio reflejan perfecto lo que pensábamos varios de los que girábamos en torno al ideal que la llevaba en ese entonces: se fue todo a la mierda, la gente poderosa es mala, triunfó la máquina sobre las personas, no future.
En general bastante utópicos, drogadictos y alcohólicos, la preocupación real de los músicos por el fin del rock es inminente. La juventud asustada de haber escuchado el último gran acorde a principios del 70, la lucha contra una industria que se los terminó comiendo y, en otros casos, matando, con declaraciones que atacan directo el manejo de las discográficas para el triunfo de las malas causas musicales. Reflexiones sobre los años que la juventud pensó que las cosas cambiarín fumando y chupando deprimidos en un sillón. Los años en que llegaron a Chile los discos que antes no existían. Instrumentos destrozados, grandes canciones. Himnos.
No es una gran película, pero si te gusta la época y quieres saber lo que nos perdimos por vivir acá lejos y recién pudimos comprender cuando llegó pearl jam a tocar por aquí, es fundamental.
Entradas
.jpg)
