24 jul 2008

LIV TV: UNA NUEVA OFERTA PARA UNOS POCOS.

LA NUEVA TELE: MI NUEVO VICIO.

El monopolio de los mismos rostros ya nos tenía medio aburridos, pero desde que me alejé de la conexión de cable, ante la mirada estupefacta de mis amigos que no pueden creer que sobreviva sin la Matrix, mi alegría es suprema al ver este curioso proceso de transición en la televisión nacional.
A "Telecanal", el enchulado "UCV", la metamorfosis sobre lo mismo de "La Red", el curioso "Más", los evangélicos (Enlace y Esperanza), la recepción que tengo del notable esfuerzo del canal municipal de la pintana, se acaba de sumar una nueva propuesta: dejar lo que fue el "Canal 54" para pasar a ser "Liv TV".
Como una suerte de Via x elegante, hay de todo un poco con animadores que tienen un carrete en televisión, pero no han llegado a ser "rostros". Son "gente que trabajó en televisión".
Juan Manuel Astorga diariamente entrevista a alguien en un programa que se llama "Sin Documentos" que está bastante entretenido y frontal. José Miguel Villouta lanza "Los nuevos chilenos", cruza entre serio / broma que tiene por intención mostrar que la generación de sobre 30 piensa. Este programa es raro. El esmero por irreverencia a ratos no permite seguirlo seriamente, siendo que pueden estar hablando un tema tremendista (de hecho, la pauta es una extraña mezcla entre "El interruptor" con "Asi somos", entre sexo, seriedad, curas, pero temas muy simples a ratos, con baile y stand up). De olfato da la sensación que hay que darle tiempo para que cuaje.
El programa "femenino" es entre Angeles y Gloria, un cocido de papas mayo en que hablan desde magia hasta masajes.
Bastante deporte, futbol femenino, programas de conversación deportiva, uno que otro programa juvenil insulzo y el "estelar": Eduardo Guillermo Bonvallet.
Acá el stand up comedy funciona perfecto, como reloj. El tipo hace lo que quiere, maneja a su fanaticada como el esquizofrénico sabio que parece ser, se ríe de si mismo, entrevista bien (un poco hiper halagador a ratos) pero cumple con objetivo básico: entretiene.
Haciendo la línea al final de la ecuación, Liv es definitivamente una suma en un medio que le está costando un montón mostrar cosas nuevas.
Se ve bien, de gráfica esta distinto... cae bien. Que bueno que la tele se decida de una vez por todas a dar alternativas gratis de hacer las mismas cosas de otra forma.